El tenista suizo Roger Federer reconoció su felicidad por clasificarse para las semifinales del Abierto de Australia, primer 'Grand Slam' de la temporada, y por medirse en ellas al español Rafa Nadal, un rival que intentará derrotar escuchando las "buenas ideas" de su nuevo técnico, el sueco Stefan Edberg.
"Será duro jugar contra él sin duda. Estoy feliz de tener la oportunidad de jugar con él de nuevo en un 'Grand Slam', no recuerdo cuando fue la última vez. Los enfrentamientos particulares están a su favor. Estoy deseando hablar con Stefan (Edberg), porque hablamos cuando vino a Dubai y hablamos sobre el juego, y también hablamos claramente sobre Rafa", señaló Federer en rueda de prensa tras derrotar a Andy Murray.
El de Basilea apuntó que su nuevo técnico "tenía algunas buenas ideas" "Así que estoy deseando ver lo que tienen que decir Severin (Luthi) y él. Nos prepararemos, espero poder ganar", admitió el exnúmero uno del mundo.
"Además, lo que me encanta realmente es que hay otro suizo en la otra semifinal y es la primera vez en la historia. Fui muy feliz por Stan (Wawrinka) porque está haciendo un gran esfuerzo en los últimos años y no siempre logró la compensación. Para mí también es un sueño y espero poder mantenerlo contra Rafa", sentenció Federer.
El tenista suizo Roger Federer será el rival del español Rafa Nadal en las semifinales del Abierto de Australia, primer 'Grand Slam' de la temporada, después de deshacerse este miércoles del escocés Andy Murray en cuatro sets por 6-3, 6-4, 6-7(6), 6-3.
De este modo, el 'grande' oceánico volverá a vivir un nuevo duelo entre dos de los jugadores más brillantes de los últimos años, en lo que será trigesimotercer enfrentamiento en su carrera, con un balance de 22-10 a favor del balear.
Además, será la tercera ocasión que ambos se midan en Melbourne Park después de la final de 2009, decidida a favor del manacorí en cinco mangas (7-5, 3-6, 7-6(3), 3-6, 6-2) y recordada por las lágrimas del de Basilea, y la semifinal de 2012, también con triunfo del actual número uno del mundo en cuatro parciales (6-7(5), 6-2, 7-6(5), 6-4).
Tras su gran partido en los cuartos ante Jo-Wilfried Tsonga, el pupilo de Stefan Edberg volvió a rayar a gran nivel y durante los dos primeros parciales apenas dejó opciones al de Dunblane, que no gozó ni una bola de 'break' a su favor y que perdió en dos ocasiones su saque, una en cada manga, para verse 2-0 abajo en poco más de una hora.
El dominio del suizo se mantuvo en el tercer parcial, donde volvió a romper para dejar al borde del abismo al británico. Fue entonces cuando el helvético se relajó tras hacer el 'break' en el noveno juego y sacar con 5-4 para cerrar el partido. Murray lo aprovechó para conseguir su primera rotura y llevar el partido a una 'muerte súbita' donde levantó dos bolas de partido para forzar el cuarto.
Federer se había complicado el choque, pero mantuvo su firmeza al saque y, tras desaprovechar seis pelotas de 'break' en el 'eterno' segundo juego del cuarto parcial y una más en el sexto, acabó con la resistencia del de Dunblane con una rotura en el octavo que sí supo certificar para volver a unas semifinales de un 'Grand Slam' tras sus reveses del año pasado en Roland Garros, Wimbledon y el US Open.
PREMIO ITF
La Federación Internacional de Tenis (ITF) ha concedido un reconocimiento a la Real Federación Española de Tenis (RFET) por la organización de la eliminatoria de la Copa Davis entre España y Ucrania, que se disputó en la Caja Mágica de Madrid en septiembre del pasado año.
La promoción de la ciudad, el clínic de los jugadores en la Plaza Mayor, la sede elegida y la satisfacción de los patrocinadores internacionales han sido, entre otros, los motivos de este reconocimiento.
El presidente de la RFET, José Luis Escañuela, ha querido agradecer la entrega del premio al Vicepresidente de la ITF, Juan Margets, haciéndolo extensivo a la ciudad de Madrid y a su alcaldesa, Ana Botella.
El tenista español Rafa Nadal se clasificó este miércoles para las semifinales del Abierto de Australia, primer 'Grand Slam' de la temporada, tras remontar para deshacerse del búlgaro Grigor Dimitrov en cuatro sets por 3-6, 7-6(3), 7-6(7) y 6-2 en casi cuatro horas de partido.
El número uno del mundo superó a un duro escollo como su prometedor rival, a gran nivel durante casi todo el partido y que no hincó la rodilla hasta el cuarto parcial, donde empezó a flojear definitivamente por el paso de las horas y la dureza del encuentro. Dimitrov demostró sus credenciales para el futuro, pero el balear le dejó claro que le gana en experiencia y en saber estar en los momentos claves.
Y es que el vigesimosegundo cabeza de serie no aprovechó el mal día del manacorí, más errático de lo habitual, sobre todo con su habitual eficiente 'drive', pero se agarró a la pista de la Rod Laver Arena y tuvo el temple necesario en los dos 'tie-breaks', claves para el devenir del encuentro, fundamentalmente el segundo, donde Dimitrov le perdonó con un error propio de un jugador poco habituado a jugar este tipo de partidos.
El campeón de 2009 en Melbourne Park esperaba un rival agresivo y se lo encontró desde el inicio. Dimitrov tiró de su poderoso servicio, sobre todo el primer saque, para llevarse la primera manga por 3-6, tras aprovechar el único resquicio que le dejó el primer cabeza de serie, que perdió su primer set en todo el torneo.
El tercer parcial fue clave y repitió el guión. El primer favorito no salía de su irregularidad, pero volvía a ponerse por delante con una rotura en el quinto juego, nuevamente desaprovechada con otra inoportuna doble falta en el octavo. Dimitrov mantenía un buen nivel y jugaba con solidez los juegos decisivos, cuando vinieron fallos vitales y con todo a su favor en un momento en el que el tenis era de gran calidad por los dos lados.
Fue el principio del fin de Dimitrov, ya menos fresco en sus piernas. El español se asentó definitivamente y no dudó en irse a por las semifinales. Volvió a coger ventaja pronto en el marcador, pero en esta ocasión no la desperdició para cerrar el partido y meterse en su vigesimosegunda semifinal de un 'Grand Slam', donde se medirá con Roger Federer.
La tenista polaca Agnieszka Radwanska eliminó este miércoles a la bielorrusa Victoria Azarenka, actual campeona, y se clasificó para las semifinales del Abierto de Australia, primer 'Grand Slam' de la temporada, donde estará acompañada por la eslovaca Dominika Cibulkova, que no dio opciones a la rumana Simona Halep.
Radwanska, quinta cabeza de serie, rompió por fin su barrera en Melbourne Park donde había sido cuartofinalista en sus tres últimas visitas tras deshacerse de la segunda favorita y ganadora en 2012 y 2013 en tres sets por 6-1, 5-7, 6-0.
La de Cracovia, que jugará las segundas semifinales en un 'grande' de su carrera, tras las de Wimbledon en 2012, donde fue finalista, y 2013, jugó muy sólida y puso fin a la racha de la de Minsk, que acumulaba 18 partidos sin perder en este 'Grand Slam'.
Azarenka estuvo muy errática (47 errores no forzados) y muy floja con su saque, que perdió en seis ocasiones, firmando una pobre despedida con el 'rosco' que le endosó la de Cracovia para cerrar un partido donde fue más sólida y que se complicó tras desperdiciar un 'break' de ventaja en el segundo set.
Ahora, la polaca, verdugo de Garbiñe Muguruza, se jugará su pase a su segunda final en un 'Grand Slam' ante la eslovaca Dominika Cibulkova. La vigésima favorita, semifinalista en Roland Garros hace cinco años, no dio opciones a la creciente pero inexperta Simona Halep a la que derrotó por 6-3, 6-0.
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