El FC Barcelona ha ganado este viernes con autoridad al Unicaja Málaga (91-60) en el Palau Blaugrana en el primer partido de la serie de semifinales del 'play-off' de la Liga Endesa, un golpe duro para un Unicaja que sale noqueado de este primer asalto y que deberá mejorar mucho de cara al domingo para no ir a Málaga con un 2-0 en contra, y es que el Barça fue muy superior en todo en esta primera toma de contacto.
Con una máxima que llegó a ser de 39 puntos en el tercer cuarto, el Barça no tuvo piedad alguna de un Unicaja descolocado desde el salto inicial y que lejos de luchar por el triunfo, como sí hizo en el Palau en la Fase Regular pese a ceder en la prórroga, fue a remolque hasta descolgarse, hasta desesperar a un Plaza que parecía no encontrar explicación a la avalancha que se les tiró encima de color blaugrana. Además de holgada, la victoria sirvió al Barça para dar más minutos a Hezonja para que el croata cogiera confianza, y también a un Nachbar que no había gozado de tiempo hasta el momento. Los reservas blaugranas respondieron, y todo el equipo brindó un buen espectáculo a los aficionados del Palau, que vieron diversos mates y 'alley-oops' a medida que su equipo iba abriendo más y más la herida visitante.
El Barça dominó a placer en la primera parte Son ya cuatro las victorias del Barça sobre Unicaja en esta temporada, dos en Fase Regular, una en Copa y esta en el primer duelo de semifinales. Abre bien la serie un Barça que tiene el factor pista a favor gracias a arrebatarle precisamente a Unicaja la segunda plaza, y que siempre ha salido vencedor en un cruce de 'play-off' ante los malagueños. Que la historia cambie para Unicaja empieza por salir a pista el domingo con una mentalidad y acierto opuestos a lo visto esta noche. El Barça dominó a placer en la primera parte. Con un ritmo muy superior a Unicaja, y una intensidad defensiva que les permitió robar hasta cinco balones y correr rápido al contraataque con Satoransky o Abrines, los blaugranas sentenciaron ya el partido. La diferencia al descanso, la máxima hasta el momento (49-29), era un presagio del triunfo. Pese a la fortaleza de Unicaja al rebote, el Barça se creció en ese apartado y no solo controló a los de Málaga sino que fue superior, cerrando muy bien el rebote defensivo.
Los de Joan Plaza no encontraban acierto en el triple y sí los de Xavi Pascual, con un 55% desde la línea exterior. Unas diferencias plasmadas en el juego y en el marcador. Tirados por Ante Tomic y Tomas Satoransky, el Barça solo dejó acercarse a Unicaja a 7 puntos (27-20) coincidiendo con la entrada de Toolson al partido en cuanto a presencia anotadora. Pero se quedó ahí pues el Barça incrementó todavía más el ritmo para ir aumentando más y más las diferencias. De hecho, tras el descanso no aflojaron y rápido aumentaron la ventaja. No pudo reaccionar Unicaja, atenazado por un Barça duro atrás, aunque quizá no tanto como para sumar tantas personales, e incapaz de frenar la avalancha del conjunto blaugrana cada vez que ponían la sexta marcha. Además, las diferentes baterías salían a pista con la muñeca caliente y los hombres de Plaza no dieron abasto para detener tantos frentes abiertos.
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