Escocia, al menos, tiene la victoria a recordar de un juego totalmente olvidable. Y la victoria solo. Adelante al más serio, más anticipado, cosas inevitablemente más entretenido contra la República de Irlanda en una eliminatoria el próximo fin de semana Euro 2016. Cuanto menos dicho sobre este juego, sin embargo, el mejor.
Estos son tiempos curiosos para Escocia. Algunos de los jugadores de Gordon Strachan tenían brecha de un mes entre la conclusión de su temporada nacional y este agradable. La visita de Qatar fue, en esencia, una sesión de entrenamiento elaborado con vistas a mantener la escuadra escocesa afilada antes del viaje decisivo del próximo sábado a Dublín.
Había opciones abiertas a Strachan, que él utiliza debidamente. Charlie Mulgrew, que vio su temporada el club arruinado por una lesión, se le dio un comienzo en el centro-medio. Altura de Mulgrew en un pequeño equipo de lo contrario, además de su capacidad de conjunto de piezas, le rinde un fuerte candidato para enfrentar Irlanda, ya sea en defensa o el centro del campo. El delantero del Celtic, James Forrest, otro que ha estado plagada de problemas de fitness, también comenzó.
La apertura escocesa era brillante. Steven Naismith, como viene siendo habitual por su país, era especialmente animado en ataque. El hombre Everton obligado Lecomte Claude Amina en una parada de 22 minutos bien después del trabajo período previo de Forrest. Mulgrew desperdició un cabezazo, a sólo seis larguero, desde la esquina resultante.
Fuera del estadio, una protesta pacífica contra el juego por un puñado de personas que transcurrió sin incidentes. La decisión de la Asociación Escocesa de Fútbol a los tribunales de Qatar se hizo aún más polémico como este accesorio creció cerca, debido al aumento de los informes del tratamiento atroz de los trabajadores migrantes en el estado del Golfo. En el interior, un streaker macho corpulento se le permitió pasear en el círculo central, bajo ningún desafío a la seguridad de ningún tipo. Los escoceses defendieron su postura sobre su asociación con Qatar pero muchos partidarios eran obviamente incómodo con la disposición.
Los que asistieron debería haber sido la celebración de un abridor de 27 minutos, Shaun Maloney fue desposeído por un lugar fabuloso Ahmed Abdelrhman entrada cuando tironeo hacia abajo a puerta. Matt Ritchie, sin embargo, pronto se dio Escocia una ventaja que merecían. El centrocampista Bournemouth aprovechó un balón perdido, la perforación a casa de 18 yardas, para abrir su cuenta internacional en su tercer partido. Naismith se recorta un puesto como los anfitriones trataron de duplicar su ventaja, apenas unos segundos antes del descanso.
Ocho minutos después del descanso el árbitro belga falló inexplicablemente adjudicar un penalti como Naismith fue empujado por la espalda. En su lugar, la consecuencia fue el delantero estrépito en el portero de Qatar, ganando algunas marcas perno hasta el cuello por su trabajo. Después de dos minutos de tratamiento, Naismith se le permitió continuar. Con sensatez, sin embargo, pronto fue retirada en medio de la balsa inevitable de sustituciones en el segundo tiempo. Ya sea vinculado a esos cambios o no, el partido retrocedido en territorio casi imposible de ver. Por lo menos la multitud, poco más de 14.000 de ellos, no habían sido absurdamente acusados de entradas que se ha convertido en una normalidad Scottish FA.
Un segundo invasor lanzamiento, esta vez vistiendo ropa, entró en escena con cinco minutos para el final, abrazado de Escocia Leigh Griffiths y huyó de la escena. Era una señal de una escena tedioso que el incidente es digno de registro.
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